Hoy nos hemos decantado por recomendar Mommy (2014), una muy
original película canadiense rodada en francés y dirigida por un precoz Xavier
Dolan, que a sus escasos 26 años ya ha rodado la friolera de cinco filmes.
La historia se sitúa en una imaginaria Canadá, donde
recientemente se ha aprobado una ley que permite a los padres ingresar a sus
hijos conflictivos en centros especializados. Die, una decidida madre, viuda y con
un hijo con brotes violentos que sufre TDAH, se niega a acogerse a dicha ley
y decide educarlo por su cuenta. Kyla, una vecina de éstos que padece un importante
trastorno que le hace tartamudear, ofrecerá su desinteresada ayuda a la desestructurada
familia.
Cabe destacar las interpretaciones del triángulo protagonista
que hacen que la historia que nos están contando resulte muy natural y cercana,
y que nos hagan partícipes tanto de las
alegrías y penas por las que van pasando. Todo esto combinado con el juego que
hace el director con la cámara, los planos, el formato cuadrado en el que está
rodada y la utilización de una magnífica banda sonora, con canciones de Oasis,
Dido, Lana del Rey, Counting Crows, Ludovico Eudiani, hace que se nos proyecten
ante nuestros ojos, probablemente, varias de las escenas más bellas e
inolvidables que se nos haya mostrado en tiempos en una pantalla.
Por esto y por su descaro y atrevimiento, merece descubrir
esta oculta joya que quizás tuvo una mayor distribución en el circuito alternativo que en el de las salas comerciales, y cuya potencia visual te dejará prendado a lo largo de toda la proyección.
Por qué una madre siempre quiere lo mejor para su hijo...
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