"La importancia de comunicarnos con el exterior"
Confinados en nuestras casas por culpa de un enemigo
silencioso de nombre técnico COVID 19, muchos nos hemos topado con rincones a
los que antes, en nuestra vida “normal”, en nuestra vida antes de la amenaza
del virus, apenas prestábamos atención. Hemos limpiado ya el congelador, la
campana, la tostadora, la juntura de las baldosas del baño, el polvo amontonado
detrás del televisor. Sin embargo, el mayor redescubrimiento son, sin duda, los
balcones (muchas veces llenos de trastos) y ventanas, que apenas abríamos y que
ahora son nuestro acceso a la auténtica red social: LA CALLE.