"El amor no es fácil, por eso lo llaman amor..."
Muchas veces, nuestras conductas cotidianas se ven condicionadas por las tradiciones religiosas de nuestras familias. Sin embargo, cuando, de pronto, aparece alguien que merece realmente la pena y uno sigue el dictado de su corazón,esos cimientos que parecían tan sólidos pueden tambalearse hasta caer.
Kumail (Kumail Nanjiani), un comediante de origen pakistaní y conductor de Uber, conoce a Emily (Zoe Kazan), una noche en un bar, durante uno de sus espectáculos cómicos. A partir de ese primer encuentro irán afianzando poco a poco una relación que va en contra de la tradición religiosa de la familia de él, musulmanes estrictos.
Basada en un hecho real sufrido por el propio Nanjiani, lo que en principio tendría todas las papeletas para convertirse en otro telefilme más para rellenar la programación televisiva vespertina (chico conoce chica, enfermedad de por medio, choque cultural, tradiciones musulmanas) resulta ser una fresca, espontánea y honesta propuesta que,aunando drama y humor de una forma sutil y original, se convierte en una deliciosa comedia romántica con una pincelada melancólica.
Parte del mérito lo tiene la química que desprende la pareja protagonista, que hace totalmente creíble la historia. La acompañan además unos secundarios de lujo: geniales los padres de ella (encarnados por Holly Hunter y Ray Romano), una pareja de intelectuales que no pasan por su mejor momento y que, en muchas ocasiones, roban escenas a los protagonistas.
Una interesante propuesta que, con un toque humorístico que se agradece, nos abre los ojos ante los arraigos y choques culturales que se dan en la sociedad actual. Otra joya de ese cine independiente americano que tanto nos gusta y que tan difícil resulta encontrar en los cines.
Muchas veces, nuestras conductas cotidianas se ven condicionadas por las tradiciones religiosas de nuestras familias. Sin embargo, cuando, de pronto, aparece alguien que merece realmente la pena y uno sigue el dictado de su corazón,esos cimientos que parecían tan sólidos pueden tambalearse hasta caer.
Kumail (Kumail Nanjiani), un comediante de origen pakistaní y conductor de Uber, conoce a Emily (Zoe Kazan), una noche en un bar, durante uno de sus espectáculos cómicos. A partir de ese primer encuentro irán afianzando poco a poco una relación que va en contra de la tradición religiosa de la familia de él, musulmanes estrictos.
Basada en un hecho real sufrido por el propio Nanjiani, lo que en principio tendría todas las papeletas para convertirse en otro telefilme más para rellenar la programación televisiva vespertina (chico conoce chica, enfermedad de por medio, choque cultural, tradiciones musulmanas) resulta ser una fresca, espontánea y honesta propuesta que,aunando drama y humor de una forma sutil y original, se convierte en una deliciosa comedia romántica con una pincelada melancólica.
Parte del mérito lo tiene la química que desprende la pareja protagonista, que hace totalmente creíble la historia. La acompañan además unos secundarios de lujo: geniales los padres de ella (encarnados por Holly Hunter y Ray Romano), una pareja de intelectuales que no pasan por su mejor momento y que, en muchas ocasiones, roban escenas a los protagonistas.
Una interesante propuesta que, con un toque humorístico que se agradece, nos abre los ojos ante los arraigos y choques culturales que se dan en la sociedad actual. Otra joya de ese cine independiente americano que tanto nos gusta y que tan difícil resulta encontrar en los cines.
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