lunes, 11 de enero de 2021

EL PADRE (Florian Zeller, 2020)

"El lado oscuro de la memoria"

 


Año nuevo y nuestro propósito seguirá siendo acudir al cine todo lo que se pueda y nos permitan, mucho más de lo que lo hicimos el pasado y devastador 2020. Aquí hemos empezado rápido y fuimos a ver la ópera prima del escritor francés Florian Zeller coescrita junto al oscarizado guionista británico Christopher Hampton (Las amistades peligrosas).

 

Anthony un ingeniero jubilado de 81 años no acepta que su hija, que se tiene que mudar a París, contrate a una cuidadora para él. Poco a poco su memoria le irá pasando malas pasadas.

 

Padre e hija charlando sobre la nueva situación.


 

El director galo se estrena en cine con la adaptación de su propia obra de teatro del mismo nombre que relata el proceso de descomposición que sufre la memoria de un hombre que llegando a la ancianidad padece de demencia senil. Lo novedoso de este proyecto es que pone al espectador en los ojos del enfermo, transmitiéndonos con total crudeza la confusión y angustia interna que experimenta el protagonista de la historia.

 

Anthony desplegando todo su "encanto" ante su nueva cuidadora.


Zeller lo tenía claro para el intérprete principal, tenía que ser para Anthony Hopkins, se tuvo que posponer el proyecto hasta que el actor británico estuviese libre, pero sin duda alguna la espera bien mereció la pena, la descomunal presencia de Hopkins y su magistral buen hacer inundan la pantalla haciéndose propio el personaje. La elección de Olivia Colman, una de las mejores actrices del momento, para el papel de la sufrida hija es otro gran acierto del casting. La partitura del maestro Ludovico Einaudi y el gran montaje final ponen la guinda al proyecto.

 

La soberbia interpretación de Anthony Hopkins huele a premios.


Una notable y cruda película que a pesar de no tener un visionado fácil, sobre todo si el tema te toca de cerca, termina siendo toda una experiencia pocas veces recordada en una sala de cine. Merece mucho la pena.

2 comentarios:

  1. Me encantó. Una película que hace pensar. Está fenomenalmente realizada y protagonizada. Los conflictos familiares que se desatan en torno a un familiar (el padre aquí) que envejece y empieza a perder la mente están perfectamente presentados y actuados por sus intérpretes. La confusión mental del personaje de Anthony Hopkins la muestra Zeller con maestría. Y Hopkins, bueno, ya se sabe, Hopkins es Hopkins: un maestro.
    Gracias, Cangurito, por haberme hecho recordar esta peli que he visto hará no más de diez días y que no quiero olvidar.
    Un beso

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  2. Me impactó mucho el punto de vista que toma la película que te hace sentir en propia piel la confusión que embarga al protagonista. Altamente recomendable. Gracias por tus comentarios Juan Carlos.

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