"Deliciosa como un bagel"
Hoy os traemos una pequeña reseña de Todo a la vez en todas partes. Película dirigida por “los Daniels” (Dan Kwan y Daniel Scheinert) y protagonizada por Michelle Yeoh y Jonathan Ke Quan. Este film propone una trama donde los protagonistas deben viajar por un multiverso de posibilidades, variables y versiones infinitas. A pesar de lo complejo que pueda parecer a priori, la narrativa visual de la película expone todo de manera muy clara y ligera, aprovechando todos los recursos cinematográficos para mostrar en pantalla infinidad de realidades.
El apartado de las interpretaciones es simplemente
impecable; los actores deben hacer gala de todos los registros para hacer
frente a lo que la película propone. Y es que la cinta coge al espectador y le
pega un meneo por todo el surtido de emociones. Tenemos momentos de comedia con
situaciones rocambolescas que rozan el absurdo, coreografías de artes marciales
cuidadísimamente rodadas, escenas de reflexión filosófica muy profunda,
situaciones dramáticas de las que te hacen nudo en el estómago y un clímax que
seguro que no dejará indiferente a nadie.
No puedo olvidarme de destacar el apartado técnico, que
calificaría de sobresaliente. Por un lado, la banda sonora, a favor de la
narrativa en todo momento, sin hacerse especialmente presente, pero guiando las
emociones (énfasis en la tensión, acompañamiento en el drama, poniendo ritmo en
las secuencias de acción…). Por otro lado, la mimadísima fotografía: tanto las
composiciones, como la iluminación o la paleta de colores elegida es un
auténtico deleite para el ojo del espectador. Por no destripar nada de la
película mencionaré solo los primeros 10 segundos de la película: esa
habitación desordenada con el espejo es un plano para enmarcar y colgar de
poster en tu habitación.
Ya en un apartado más personal quiero citar dos aspectos más
concretos que me llamaron especialmente la atención. En primer lugar, las
escenas de acción. Tiene mucho mérito, hoy en día, conseguir unas secuencias
tan trepidantes, divertidas e imaginativas de acción. Además de las cuestiones
técnicas que he mencionado antes, me ha parecido que derrochan creatividad,
tanto en el manejo de la cámara como en los movimientos, o en las implicaciones
de los personajes. Sirva de ejemplo la escena de la pelea con la riñonera. Por
último, las transiciones entre escenas. El uso de recursos como el formato
episódico, la sucesión de fotografías y la trama multiversal están
perfectamente ligados para regalar momentos de transición que de verdad me
hicieron pegar un bote en la butaca.
Espero que esta película os haga sudar cine como a mí.
Como ya comentamos en su día, es una puta rallada, pero mola. Posiblemente, esta sea una d esas pelis q hay q ver más d una vez para sacarle todo el jugo
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo. Ha sido la gran triunfadora en los Oscars. Habrá que darle otra vuelta...
Eliminar