"Una película imprescindible"
La discapacidad es un tema peliagudo para reflejarlo en la
pantalla grande, ya que se corre el riesgo de caer en la sensiblería y la
condescendencia. Sin embargo, nada de esto se atisba en la nueva película de
Javier Fesser, que, combinándola con un deporte de equipo –cargado de valores
como la solidaridad, el sacrificio o el respeto– como es el baloncesto, aparece como una
admirable propuesta.
Marco (Javier Gutierrez), segundo entrenador de un equipo de
baloncesto profesional, no pasa por su mejor momento y, tras sufrir un
incidente de tráfico, es condenado a entrenar a un equipo compuesto por
personas con discapacidad intelectual.
Partiendo del guion de David Marqués, inspirado en un
artículo publicado en la prensa, Fesser nos regala una preciosa historia que
mezcla ternura y humor sin preocuparse por la corrección política –algo que ha
estropeado otros trabajos–, creando, por un lado, situaciones totalmente
delirantes y, por otro, momentos de gran carga dramática.
Encomiable trabajo de dirección, sobre todo con los actores
noveles, que con su naturalidad y encanto realzan la historia. Cabe destacar,
una vez más, al polifacético Javier Gutierrez (último ganador del Goya al Mejor
Actor, por El autor), que, a pesar de no parar de hacer películas,
siempre mantiene el nivel en todas y cada una de ellas. Apuntamos que la actriz
que interpreta a la novia de Marco es Athenea Mata, otra joya salida de aquella inagotable cantera de actores y actrices que fue Al salir de clase.
Una buena ocasión para acudir con la familia
al cine más cercano y dejarse emocionar y divertir por esta cinta cargada de
valores que nos hará replantearnos dónde se esconden las verdaderas
discapacidades… Tal vez el prejuicio sea la peor de todas.
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